La Diabetes Como Problema De Salud Crónico

La diabetes constituye un problema de salud crónico cada vez más frecuente en todo el mundo. La afectación de niños y adolescentes, además de las connotaciones afectivas que a todos nos afectan, conlleva la creación de situaciones potencialmente complejas y la posibilidad de aparición de complicaciones en edades tempranas, a las que hay que dar respuesta y prevenir. Por otra parte, los niños/as y jóvenes pasan la mayor parte del día en los centros educativos, donde también necesitan seguir controlándose su enfermedad y tener la seguridad de que se van a prevenir las posibles situaciones agudas y complicaciones que pudieran presentarse, para que puedan desarrollarse plenamente, tanto física como intelectualmente.

En este informe contaremos cuales son algunos de los cuidados que se tienen que tener en cuenta en el ámbito escolar ya que la Diabetes está presente en la vida de quien la padece 24 horas de su vida y los chicos quienes pasan muchas horas en el colegio o actividades dentro del colegio como viajes de estudios o extracurriculares, programas de cuidado de niños o programas recreacionales , los cuidados deben ser lo suficientemente completos de tal manera de manejar todas las necesidades a la hora de que disfruten y realicen las mismas actividades que sus pares pero siempre en forma segura y saludable. Los estudiantes tienen el derecho de recibir todos los cuidados apropiados para su enfermedad y así poder estar integrados a todas las actividades en forma normal y sin discriminación.

Las escuelas deben proveerles, personas entrenadas para el control del azúcar en sangre y la correcta aplicación de las insulinas que en cada caso son diferentes medicaciones. Personas que estén capacitadas para su correcto cuidado en cualquier actividad extracurricular o dentro del mismo colegio y así darles el conocimiento y la capacidad a los mismos estudiantes así pueden ellos mismo aplicar conocimientos para su propio cuidado.

¿Qué es la diabetes?

La Diabetes es una condición crónica donde el cuerpo no puede usar el azúcar de la comida para dar energía al organismo. Es una enfermedad causada por la falta o deficiencia en los tejidos de la insulina. La insulina es una hormona producida en el páncreas en la que es principal protagonista en la regulación del metabolismo de azucares y grasa. Al no existir insulina en el organismo se acumula la glucosa en sangre, lo cual se llama Hiperglucemia, este aumento de azúcar en sangre produce un aumento de eliminación de agua por la orina, la cual se llama Poliuria. Esto hace tener sensación de sed constantemente y produce las ganas de beber mucha agua. (Julio Guerrero 2018).

Hay dos tipos de diabetes tipo 1 y tipo 2. Algunos niños y adolescentes tiene diabetes tipo 2 pero la gran mayoría tiene diabetes tipo 1, la cual es generalmente diagnosticada en edad temprana.

La diabetes no tiene cura, la cual es de por vida la toma de medicamentos y la colocación de insulina en diferentes valores pero es para toda la vida. Pero se puede tratar y vivir una vida normal con los cuidados que requiere este tipo de enfermedades.

Diabetes tipo 2

La diabetes tipo 2 generalmente se diagnostica ya en edad adulta y en sus inicios se comienza tratamiento con pastillas y si no se logra controlar o llegar a valores dentro de lo normal para esta enfermedad, se medica insulina, pero eso no significa que el paciente tenga diabetes tipo 1, la cual su tratamiento desde el inicio es con inyección de insulina.

Algunas consideraciones para el tratamiento de diabetes tipo 2:

• Alimentarse en forma balanceada
• Actividad física en forma regular
• Cambios de hábitos en la vida cotidiana , como bajar de peso si se lo requiere
• Monitoreo de los valores de azúcar en sangre
• Hidratación permanente.
• Toma de pastillas en los horarios indicados
• Control de los hidratos de carbono
• Controles en lastimaduras y su cicatrización
• Control en la parte de pedicura, por el síndrome de pie diabético
• Tratar de vivir una vida normal y sin obsesiones.

Diabetes tipo 1

La diabetes tipo 1 es la más común en niños y adolescentes ya que como hemos mencionado anteriormente se diagnostica en edades tempranas. Acerca de 1 en 400 niños desarrolla diabetes tipo 1 y estos valores van en crecimiento alrededor del 4% cada año. Los paciente con diabetes tipo 1 deben medicarse con insulina o medicamentos de por vida. Y en general no se pasa de un tipo de diabetes a otro tipo de diabetes.

Muchos al ser diagnosticados no conocen nada de la enfermedad ni tampoco reconocen muy bien sus síntomas, y si nos preguntamos que la produce, en realidad no se tiene con certeza las causas, pero nombraremos algunas para poder aclarar este cuestionamiento.

Y diremos que es una combinación de estos factores:

• Auto inmunidad, o sea, el cuerpo ataca y destruye su propia células productoras de insulina.
• Algunos disparadores ambientales, se dice que depende de los lugares donde uno vive hay mas predisposición a contraer diversas enfermedades.
• Y por supuesto el factor genético, la historia familiar.
• Exposición a virus
• Edad, aunque la diabetes aparece a cualquier edad, tiene incidencia en dos momentos críticos en niños, de 4 a 7 años y la segunda etapa de 10 a 14 años.

El niño y adolescentes con diabetes en los colegios

En el ámbito escolar es sumamente importante que el trabajo de prevención y cuido del niño o adolescente sea coordinado y eficaz. Al igual que en su hogar, el niño debe estar resguardado y cualquier contrariedad que se presente todos deben saber cómo proceder, es un trabajo en equipo tanto de directivos, docentes y fundamentalmente de los padres que deben informar cualquier eventualidad que se produzca cualquier cambio de medicación que el doctor a cargo del menor haya determinado, y si es posible, proveer la dieta al sistema de comida en los colegios o ellos mismo traer la comida a su hijo/a.

El colegio es unos de los ámbitos más importantes donde el alumno con diabetes transcurre muchas horas al día, por eso es muy importante que todos en la comunidad educativa tengan los conocimientos apropiados para poder ayudar y hacer más placentera la vida escolar. Es por eso que resulta de suma importancia que todos los miembros de los establecimientos sepan y cuenten con los conocimientos adecuados para proporcionar seguridad al alumno y padres que padecen esta enfermedad. Es importante que la comunidad educativa se instruya tanto en los ministerios de salud, como en las ONG especializadas y en los centros de diabetes, donde educan tanto al enfermo como a la familia, porque esto le cambia la vida a todo el grupo familiar no solo a la persona que fue diagnosticada.

Por otra parte, los niños y adolescentes deben ser capaces de ir lidiando tanto con su enfermedad como con sus cambios de hábitos y eso implementarlos en su ámbito escolar. Por ello, hay que tener en cuenta que los niños o adolescentes deben ser capaces de manejar su glucómetro y también poder ser capaces de inyectarse adecuadamente su insulina. En el nivel primario el alumno ya tiene que ser capaz de ayudar a controlarse y saber los valores normales a los que debe llegar y también con supervisión, ya puede proceder a la colocación de la insulina o la toma de medicamentos. En el nivel secundario, ya deben ser más independientes en el monitoreo de sus niveles de azúcar en sangre, aunque se requiera supervisión de algún adulto, en caso de ocurrir alguna emergencia. Es importante saber que la calidad de vida de los niños y adolescentes con diabetes es el control las 24 horas. Y aunque sabemos que hay que tratarlos de la misma manera que al resto del alumnado, debemos hacer diversas consideraciones y adaptaciones para que sea lo más normal posible su estadía en la institución, como dejarlos hacer sus controles de glucosa en clase de ser necesario, o comer en caso de ser requerido. También que accedan al permiso de ir al toilette con la frecuencia que sea necesaria. Respetar sus horas de comida, adaptar las planificaciones de las clases a estas necesidades y/o posibles emergencias. Las clases de educación física deberán planificarse con todos estos recaudos y más si hay actividades extra curriculares o si salen de lo normal de la actividad. Adaptar las planificaciones especiales, como exámenes, actos, salidas a determinadas situaciones que se presenten en el marco del adecuado seguimiento sobre esta enfermedad, como visitas a su doctor, exámenes para control, y demás situaciones específicas médicas que surjan.

Otra importante acepción es cuando el alumno ya entra en su periodo de adolescencia o pubertad, ya que en este periodo conlleva varios cambios propios de la edad, aceptación de pares, inclusión de grupos, rebeldía hacia lo que lo rodea o cuestionamientos de todo sumado a la critica tanto individual como grupal, se puede presentar un mal manejo de los controles tanto en el colegio como en sus hogares, la resistencia de la insulina que se da mucho al inicio de este periodo y problemas psicológicos. Hay que estar muy pendientes de ellos si se detecta alguna de estas problemáticas.

Hay que ayudar, también, a todos los compañeros a que ellos puedan ser parte de esos conocimientos ya que cuando no hay información acerca de ciertos temas o enfermedades se instala el miedo y el no saber cómo relacionarse entre ellos. Para el niño o adolescente con diabetes es muy importante saber cómo se manejan en su ámbito escolar, les da seguridad y protección, lo receptivos que pueden ser a su situación y como sus necesidades son cubiertos y adaptados en su escuela. Acercar al alumnado a nuevas situaciones y sacarlos de su zona de confort, es muy importante, que se acerquen a ese compañero/a, que padece alguna enfermedad o discapacidad y hacerlos participe de de la inclusión en su ámbito escolar, es una herramienta fundamental para el futuro de todos.

Actividades extracurriculares

Cuando un colegio o institución decide escolarizar un alumno/a con diabetes , debe tener en cuenta y nunca olvidarse de no marginarlos en cualquier actividad especial , vieja o salidas extra programáticas, deben estar diseñadas con la mente en ese alumno/a con diabetes. La preparación de esa actividad debe ser conocida con tiempo de antelación, tanto el alumno/a como los padres, deben saber donde, horarios, que comidas llevar, que bebidas en común tendrán o llevarse ellos su propio agua o lo que fuese a beber. Tanto viajes como salidas de especiales, nos dan a entender que pasaran varias horas o tal vez días fuera de casa. En el caso del profesor a cargo deberá recordarles que deben disminuir las dosis de insulina, en el día y en la noche, para no producir ningún episodio de hipoglucemia. Siempre deben tener su identificación personal, que de información de que tipo de diabetes padece, por cualquier eventualidad, y la persona que lo ayude no sepa qué enfermedad padece.

En el caso de salidas cortas, deberán llevar bebidas adecuadas y alimentos con carbohidratos de absorción lenta, como bocadillos o yogurts. Si la salida es más larga, además de sus alimentos, debe procurar tener la cantidad de jeringas e insulina requerida para los días en que la salida esta programada, tiras reactivas para el control permanente de la glucosa, su identificación siempre, y el glucómetro.

Celebraciones escolares

En toda institución o escuela siempre hay celebraciones especiales como actos, obras de teatro, comedia musical, muestras de teatro, en ese caso tanto los padres como el alumna/a deben saber con anticipación que planean hacer, horarios, comida y/o actividades, así poder armar la participación del niño/a sin ningún riesgo de hiperglucemias o hipoglucemias. En el caso de las celebraciones de cumpleaños en la escuela, se podrían implementar festejos sin tantos dulces, caramelos o comida con mucha azúcar, no solo por los niños que padecen diabetes sino que sería de gran beneficio para todos. Tanto en celebraciones como en actividades especiales nos podemos encontrar con situaciones especiales en niños con diabetes, como vómitos, fiebre o diarrea. En estos casos tenemos que hacer el inmediato control de los valores de la glucosa y llamar a los padres y a su doctor o institución que este controlando al paciente, por eso es de suma importancia que siempre tenga en su poder la tarjeta de identificación con toda la información acerca de la enfermedad. Tener cuidado con los mareos y los golpes de calor, la hidratación es muy importante.

Actuación de los padres

Se requiere ante la incorporación del niño o adolescente con diabetes que los padres se reúnan con directivos, maestros, profesores, equipo pedagógico y den toda la información que ayude al buen manejo de la enfermedad en la institución. Deben proveer los horarios establecidos de comidas o meriendas, ejercicio físico y cantidad indicada por su doctor, niveles de hipoglucemia, insulinas debidamente guardadas y refrigeradas, números de contacto en caso de emergencia, compromiso de informar todo cambio en medicación o reglas establecidas por su doctor, y reuniones de seguimiento frecuentes. Es muy importante también, que los padres dejen saber a todo el personal docente y directivos las pautas a seguir en casos de emergencia y asegurarse de que la comunidad escolar elegida sepa que hay un alumno/a con diabetes y que no lo dejen solo en alguna situación en particular. Deben dejar en forma escrita todo tipo de información acerca de medicación, comidas, actividad física y aclara en forma especial los síntomas de hipoglucemia y el proceder en caso de producirse.

Conclusión

A modo de conclusión podemos decir que nuestras escuelas están llenas de distintas problemáticas que no pueden ser dejadas de lado, la diabetes es una de ellas. Cabe destacar que existe un desconocimiento muy grande tanto de la enfermedad como de sus cuidados, y en el ámbito escolar es muy notorio ya que no existe formación en este campo de enfermedades crónicas. Esta falta de conocimiento es tanto de parte de directivos, docentes y en especial del alumnado. Es muy importante hacer hincapié en la necesidad de la creación de manejo áulicos y protocolos escolares tanto para el día a día de los alumnos/as que son diagnosticados con esta enfermedad sino también en casos especiales mencionados en este informe.

Es primordial saber los cambios que se origina con esta enfermedad y poder concientizar el abordaje de ellos y hacer participes a todos los compañeros ya que con el esfuerzo en conjunto se hace más liviana la convivencia en la escuela.

También cabe destacar el rol de los familiares de los estudiantes con diabetes, ellos son los pilares para que se tome concientización y real bienestar a pesar de la enfermedad. Finalmente como a modo de cierre y reflexión (Isabel Moneo, 2017) afirma “que en el colegio no solo se aprende sobre el contexto académico sino también a “vivir”. Parte de esta enseñanza es aceptar su enfermedad, y en la escuela pueden aprender a integrarla en sus vidas para que esta no merme su felicidad. Además, un niño pasa la mayor parte de un día lectivo en el entorno escolar, es de crucial”