Las Tribulaciones Del Estudiante En La Novela Törless

En el aprendizaje de la vida, muchas personas manifiestan que hay que ser adolescentes rebeldes para ser ancianos sabios ¿cuánto hay de cierto en dicha afirmación? Un individuo al llegar a las puertas de la adolescencia comienza a enfrentarse a varias situaciones que en cierta medida confunden al sujeto por la falta de experiencia en los distintos ámbitos que diariamente se presentan, hasta llegar a la etapa de la madurez. La mocedad es un camino largo y curioso que al recorrerlo van exhibiéndose los más profundos y primitivos sentimientos del ser humano, acumulando vivencias que posteriormente le sirvan para desenvolverse conductualmente de manera más correcta dentro de una sociedad paradigmática.

Al trasladarse a los 8 y 9 años de edad, los pensamientos sobre la vida son cándidos, ingenuos e inquietos; todavía no pueden ser calificadas como sicalípticas, cuando se alcanza la pubertad naturalmente hay pequeñas nociones de lo que próximamente se conocerá como sexualidad. Según Christian Almagro, estudiante ecuatoriano de psicología: “La adolescencia es una etapa del ser humano crucial para su ulterior desenvolvimiento social, puesto que es en este período donde construimos las relaciones con otros seres humanos, generando vínculos y afectos que hasta cierto punto permitirán construir la personalidad”.

Robert Musil, quien con su retórica describe en su primera novela las diferentes situaciones que vive un mancebo dentro de un ambiente que tiende a lo anárquico, conoce por experiencias personales, el sentir de la adolescencia, en el contexto situacional de su vida. Fue un escritor austriaco proveniente de una familia de la baja nobleza, su rebelión ante la educación provocó que sus padres lo enviaran a un internado durante dos años cuando aún era un niño; posteriormente, en septiembre de 1894 Musil ingresó en un instituto militar para jóvenes oficiales. En 1906 publicaría su primera obra literaria “Las Tribulaciones del Estudiante Törless”. Diversos críticos literarios afirman que la novela es una tácita autobiografía y aunque sea verdad o no, lo cierto es que la obra literaria, narra la realidad de los púberos dentro de un ambiente completamente viril, sin influencias femíneas, además que toca temas controversiales para la época. Tomando esto en cuenta es necesario responder la siguiente interrogante ¿De qué manera Robert Musil describe las confusiones de la orientación sexual de Törless?

La naturaleza de la conducta de un adolescente está fuertemente influenciada por sus amigos y compañeros, el adolescente normalmente busca asociarse con grupo de pares y es algo que se manifiesta en Törless, personaje principal de la novela, quien al llegar al instituto conoce a sus compañeros Reiting, Beinerberg y Basini, personajes redondos que poseen inestables idiosincrasias. La etapa biológica por la que están cruzando estos cuatro personajes es caracterizada por ser fundamentada en el desarrollo psicológico, pues es en la etapa de la adolescencia que se forja la personalidad, se afianza su identidad sexual y se conforma su sistema de valores; esta es una época de rebelión, de búsqueda y oposición e incluso de extremismos en ciertas ocasiones. Así pues, Törless es víctima de sus impulsos naturales que despiertan cuando es abandonado a la suerte de su soledad, empieza para él una aventura donde buscará definir su orientación sexual, cabe mencionar que en el instituto solo se aceptaban hombres.

Las primeras manifestaciones de su ciclo puberal aparecen vagamente detalladas en desde el séptimo párrafo donde se lee:

Törless se sentía ahora muy descontento y trataba vanamente de encontrar, aquí y allá, algo nuevo que pudiera servirle de apoyo. Un episodio de esa época fue característico de lo que se estaba preparando en el interior de Törless. Un día ingresó en el instituto el joven príncipe H., que pertenecía a una de las familias nobles (…) Pero, desde el primer momento, ese estudiante produjo en Törless una fuerte impresión. (…) Para Törless, el trato con el príncipe constituyó, pues, una fuente de delicados goces psicológicos. (Musil,1906, p.4)

De esta manera podemos notar que la psique del joven Törless se encamina hacia erotismos y se halla en un proceso de consolidación en el que ha de producirse la integración psicológica del cuerpo sexuado y la progresiva emancipación de las figuras parentales, algo que se evidencia cuando junto a Beinerberg visitan a la meretriz Bozena y es atacado por pensamientos profundos que describen su situación, pero que él mismo consideraba inadecuados, aunque aquello no quita el hecho de que sus pensares emanaban el deseo sexual, que resistía dentro de sí. Algo parecido sucede con Beinerberg, cuando se aprecia más desenvuelto con Bozena, es decir, más recíproco con las caricias carnales que la mujer ofrece a los macebos que llegan a ella para aplacar en cierta media sus deseos reprimidos.

Si Bozena hubiera sido pura y hermosa y él hubiera podido amar a esa edad, probablemente la habría mordido para hacer que en él y en ella el placer se elevara hasta el dolor. Porque la primera pasión de los adolescentes no es amor de uno por el otro, sino odio contra todo. (…)Pero algo distinto ocurría en Törless: se sentía solo. La vil prostituta entrada en años no podía desatar todo lo que había en él. Pero como era mujer, podía hacer asomar prematuramente a la superficie aspectos del interior de Törless que, como brotes que debían madurar, aguardaban aún el momento del fruto. (Musil, 1906 p.21)

Dentro del relato de Musil, se describe a Basini, como un muchacho que al igual que los demás busca establecer su personalidad, pero que será irrumpido por Reiting. Basini representa la figura femenina por su fisionomía y por su debilidad, en una época en la que la fuerza es una peculiar pincelada de tintes de hombría, explotado por Reiting, quien desde su primera aparición mantiene un carácter imponente y fuerte, lo que incluso permite pensar que es el único adolescente, que ya tiene definida su personalidad, y aunque hasta cierto punto sea así, es Basini, la persona que provoca un desliz en Reiting, puesto que se deja llevar por sus impulsos sexuales y termina manteniendo una relación amo/sumiso, incluso manteniendo relaciones coitales con Basini, como consecuencia se evidencia que la novela también presenta situaciones homoeróticas, que hacen referencia al gusto sexual, caracterizada por la presencia de deseos sexuales, que se centran en una persona del mismo sexo. Cabe destacar que el homoerotismo, a pesar de estar estrechamente relacionado con la homosexualidad, difiere de este en la definición de sus conceptos. Entre los renglones de la obra literaria se aprecia que Törless protagoniza situaciones que en cierta medida hacen creer al lector que el joven es homosexual, este tema ha sido abordado por muchos especialistas, según últimas investigaciones realizadas se manifiesta que existen características genéticas, que permiten que muchos recién nacidos al lleguen a tener esa tendencia sexual. La Biología manifiesta que la homosexualidad es producto de un error genético en la constitución de los cromosomas sexuales (X e Y) por lo que los alelos de estos cromosomas, aportan un desorden psicológico en el neonato concebido, por lo tanto, el joven Törless simplemente atraviesa una confusión y como resultado tenemos el ya mencionado gusto sexual, esto es efecto, de que en el interior del internado solo vivían hombres, no tenía una figura femínea, con la cual se pudiera apaciguar sus primeros instintos sexuales y lo que le quedaba era idealizar siluetas femeninas con figuras naturalmente masculinas.

Le hubiera gustado mirar intensamente a Beinerberg en los ojos, pero el otro lo hubiera advertido y entonces habría tenido que dar alguna explicación. Pero así precisamente, mirándolo sólo a medias y completando a medias la imagen en la fantasía, advirtió en qué consistía la falta de acuerdo. Si imaginaba a Beinerberg desnudo le resultaba del todo imposible mantener la representación de una tranquila esbeltez. (Musil, 1096 p.12)

Para concluir, Musil usa la retórica junta una pequeña ampulosidad para llegar a la criticidad del lector, a quien trata de mostrar la realidad social, que se vive dentro de un internado de renombre, como el de la novela o como el internado en el que el propio autor vivió. La obra literaria Las Tribulaciones del Estudiante Törless, nos presenta una lectura intensiva que llega a ser complicada en ciertas partes, pero que describe de manera concreta y extravagante las distintas situaciones que vive un joven adolescente, durante su periodo puberal. Podemos notar que el homoerotismo es consecuencia del hecho de estar encerrado dentro de un ambiente masculino en su totalidad y esto provoca en Törless y en sus compañeros una confusión, en su orientación sexual, pues el trío de colegas comienzan a usar el cuerpo de Basini para explorar su sexualidad, a quien parece no molestarle, sino que más bien lo disfruta; de tal manera, comprendemos que dentro de estos institutos, cuyo objetivo es preservar a la juventud de las corruptoras influencias de la gran ciudad, se viven sucesos que irónicamente contradicen la filosofía impuesta, atentando psicológicamente el despertar sexual de los jóvenes que no pueden controlar sus impulsos.

Bibliografía

  • Ruiz Lázaro, P.J. Psicología del Adolescente y su entorno. Recuperado de: http://www.codajic.org/sites/www.codajic.org/files/Psicolog%C3%ADa%20del%20Adolescente%20y%20su%20entorno%20P.J.Ruiz%20L%C3%A1zaro.pdf
  • Musil. R. (1984). Las tribulaciones del estudiante Torless. Barcelona, España: editorial Seix Barral S.A.
26 Jun 2021
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